Conmemoramos hoy, en el día de San Carlos Borromeo, la Festividad de la Dinastía Legítima, fecha señera de nuestro renovado Pacto "Dinastía-Pueblo". El peculiar carisma del santo patrón de la Dinastía, así como su acreditada conciencia social ha sido modelo para los carlistas durante muchas generaciones. Nuestra fe, nuestra entrega y nuestro compromiso son buena prueba de ello.
Inmersos en la pandemia mundial provocada por la COVID-19, nuestra sociedad está atravesando una crisis sanitaria, política y social que no tiene precedentes. A la tragedia personal de los miles de españoles fallecidos, que en mi familia hemos sufrido especialmente con la muerte, el pasado mes de marzo, de mi querida tía María Teresa, se suman las dificultades que están padeciendo muchos de nuestros compatriotas. Los trabajadores más precarios, los autónomos, los desempleados y los colectivos más vulnerables son, junto a sus familias, quienes más están sufriendo esta crisis.
Por ello es necesario que los carlistas tomemos ejemplo del compromiso social de todos los que nos precedieron y continuemos recuperando nuestra presencia en todas las esferas de la vida pública, para dar a conocer las propuestas más sociales del Carlismo.
Entre otras cuestiones, es necesario que acabemos con la precariedad laboral que sufren muchos trabajadores, que apoyemos a nuestro tejido social y familiar, que han aguantado estoicamente durante toda esta crisis, y que pongamos coto tanto a la pobreza energética que sufren millones de españoles como al grave problema de la vivienda al que se enfrentan muchos de nuestros compatriotas.
Este año no podemos encontrarnos físicamente como ha sucedido en años anteriores para conmemorar esta festividad, que además este 2020 coincidía con el X aniversario del fallecimiento de mi querido padre, Carlos Hugo, pero no desesperemos, el año próximo seguro que podremos estar juntos.
Apelo a que continuemos colaborando entre todos, Dinastía y Pueblo, para trabajar por el Bien Común y contribuyamos eficazmente a mejorar la vida de tantas familias españolas.
En la Haya, a 4 de noviembre de 2020